Pecadora


Pecadora, cuando lo enamores,
¡sedúcelo y miéntele de frente!
Aunque le causes muchos dolores,
¡fóllatelo y rómpele la mente!

Cuando su frágil cerebro reventaste,
perdiste tu sacralidad con dolor:
¿dónde está de tu historia el genuino amor
del audaz sujeto que un día tú amaste?

Rompes la débil rama que se ha secado
de aquel amor que ya se había acabado;
ahora lloras por el hombre que se ha ido,
pero la puta interna aún no ha salido.

Lloras, y en mi imaginación
me pregunto con cinismo,
si llora tu misticismo
o si lloras por perdición.

Ante el amor, ignorada,
te estás gangrenando ahora,
mas no te quiero endiosada,
¡te prefiero pecadora!

Pecadora de traidor gruño:
como santa nadie te ha visto,
¡cauteloso, hasta el Anticristo
te desafía con su puño!

Quítate el vestido denso
que asfixia todo tu cuerpo;
busca el dolor en el menso
mas que el amor en el terco.

Eres ser sacrosanto
porque todo el dolor
que sufres del amor,
lo glorifica el llanto.

Sacarte llantos será tu infierno
cuando mi incitante nombre implores;
pecadora, ¡no importa que llores
si siempre llora todo lo eterno!

Pecadora, es tiempo de confesarte
porque eres tan dura como una roca,
aunque clemencia suplique tu boca,
creo que ni Dios puede perdonarte.


© Elvis Dino Esquivel

Imagen: nairafee

0 Comentarios: